En nuestro país la oferta de préstamos para jubilados es escasa: a diferencia de lo que ocurre con otros segmentos, sólo algunas entidades y cooperativas brindan soluciones específicamente diseñadas para esta porción de la sociedad, por lo que la tarea de conseguir financiamiento puede resultar compleja para los adultos mayores.
Características de los préstamos para jubilados
En primer lugar es importante destacar que existen muy pocas soluciones directamente dirigidas a adultos mayores: por lo general los préstamos para jubilados son créditos personales para todo público que están al alcance de personas mayores.
Esto hace que algunos préstamos para jubilados sean poco convenientes, ya que no tienen en cuenta su situación económica, que en buena parte de los casos es muy distinta a aquella que atraviesa una persona con familia y un trabajo estable.
En este sentido podemos decir que los requisitos para acceder a estos préstamos para jubilados son básicamente los mismos que los que se solicitan a trabajadores en edad activa, con la diferencia de que a estos últimos se les pide un comprobante de ingresos mensuales, mientras que a los jubilados se les exige un comprobante de los ingresos que tienen a través de su jubilación o pensión.
Oferta de préstamos para jubilados
Si bien muchos bancos cuentan con líneas de préstamos para jubilados, también existen muchas financieras y cooperativas de ahorro y crédito que proporcionan este tipo de servicios a los adultos mayores de Colombia.
Un ejemplo de esto es la Cooperativa de Crédito Confiar, que proporciona diferentes líneas de crédito personal, entre las que se incluyen soluciones de préstamos para jubilados. Los requisitos y condiciones de dichos créditos varían según el tipo de préstamo que se solicite, el monto, el destino y el plazo que se elija.
Es muy importante que, al momento de solicitar préstamos para jubilados, el adulto mayor cuente con el asesoramiento de un familiar o persona cercana de confianza para colaborar con los trámites y la gestión. Esto no es sólo para facilitar el proceso, sino también para evitar fraudes y estafas, algo que lamentablemente ocurre con frecuencia en ciertas financieras y prestamistas informales que se aprovechan de la situación.
